Intensa mujer de mis cansados labios
tápate los oídos,
no escuches y no mires.
Hay un dragón humeante silbando en tu ventana.
Hay un nahual atroz rondando tus esquinas.
Hay un demonio gris
que te persigue.
Intensa mujer de mis perdidos ojos
sacúdete las piernas y huye lejos,
corre lejos, lejos
para que no te alcancen los reclamos de mis monstruos
ni su vaho persistente
ni el resuello
de su tosca pasión mal atendida.
No hagas caso a este amor, aunque me hinque,
bella mía,
aunque ponga mis dos manos
palma a palma.
No quiero que escuches mis requiebros,
tápate los oídos,
atranca las orejas con firmeza,
no me dejes entrar, yo te lo ruego,
aunque me desgañite
y lo pida por Dios y por mi madre,
cierra tu corazón con diez aldabas,
no dejes un resquicio, nada, nada abierto,
ponle mastique a los cristales
y una sábana vieja al hueco de la puerta,
no me dejes entrar, amada mía, te lo suplico,
no dejes que pase, hermosa mía, aunque me hinque,
pues si lo haces
te arrepentirás toda la vida
porque entonces yo seré tu raíz y tu avena
y el ángel de tu casa
y vivirás como loca todo el tiempo
y pensarás que ser feliz es muy sencillo
y llorarás en mi tumba cuando muera.
AUTOR : http://flaviohugo.blogspot.com/
EL PODER DEL SUEÑO
-
*Dios no te hubiera dado la capacidad de soñar sin darte también la
posibilidad de convertir tus sueños en realidad.*
Hace 11 años
0 comentarios:
Publicar un comentario
Te invito a que comentes tu opinion sobre las entradas sin ninguna clase de restriccion, siempre y cuando se conserve el respeto. Me encantaria recibir muchas opiniones y sabre valorarlas.